El proceso de donación de óvulos es rápido y seguro. Además, antes de iniciarlo, todas las donantes se someten a diferentes pruebas (examen médico, revisión ginecológica, análisis de sangre, estudio de cariotipo, ecografía, etc.) para comprobar sus niveles hormonales y su estado de salud general, especialmente, a nivel ginecológico.
De hecho, esta fase previa a la donación es un «chequeo médico» completo con el que obtendrás información importante sobre tu salud general y reproductiva.
Un acto solidario, altruista… Y responsable
La donación implica una serie de responsabilidades. Por eso, es fundamental que conozcas cada paso del procedimiento completo de donación de óvulos y sus implicaciones.
Debes tener en cuenta que no acudir a un control o no administrarte la medicación adecuadamente puede llevar al fracaso del tratamiento. Por eso es importante que, como donante o futura donante, sigas los consejos de nuestro equipo médico, siendo el primero: cuidar tu estilo de vida.
Un buen momento para cambiar y mejorar tus hábitos
Un estilo de vida activo y saludable es especialmente importante si quieres donar tus óvulos pero, sobre todo, es importante para tí misma y tu futuro. Quizás, este proceso sirva también para ayudarte a revisar tus hábitos, eliminar aquellos negativos y adoptar otros que te ayuden a llevar una vida más sana.
A continuación te damos algunos consejos para que así sea:
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Controla los nervios, reduce el estrés y mantén el equilibrio emocional
A veces, los problemas en el trabajo o algunas relaciones personales o laborales generan tensión que influye en nuestra salud y en nuestro equilibrio emocional.
El estrés también es negativo para la salud física y reproductiva de la mujer, pues dispara la producción de cortisol y prolactina, dos hormonas que, en exceso, afectan negativamente a la ovulación y, por tanto, al proceso de la donación de óvulos.
El estrés es un fenómeno complejo que puede relacionarse con trabajar muchas horas al día o con no descansar suficiente.
Aprender a gestionar tu tiempo, ser positiva, hacer ejercicio o recurrir a la terapia profesional son fórmulas para reducir tu estrés y mejorar tu calidad de vida, tanto antes como después de donar óvulos.
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Cuida tu alimentación
Una de las principales recomendaciones para las futuras donantes es comer de manera saludable.
Antes de la donación, los expertos aconsejan incluir en la dieta suficientes proteínas (de pescado, res, huevos y legumbres), hierro, zinc y vitaminas C y D, ya que el déficit de estos nutrientes puede influir negativamente en la ovulación.
Mantener estas recomendaciones dietéticas después de la donación es una buena idea: aumenta el consumo de frutas y verduras, come proteínas de calidad, controla las grasas y elimina los alimentos procesados y ultra procesados.
A todo esto, añádele una buena hidratación con la ingesta de 1,5 litros de agua al día.
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Elimina el tabaco
Las donantes deben eliminar el consumo de tabaco durante la estimulación ovárica. Además, la nicotina es una sustancia muy dañina para la salud que, además de perjudicar todo tu sistema respiratorio y cardiovascular, también puede envejecer prematuramente tu aparato reproductor y comprometer tu futura fertilidad.
Por eso, la donación es un buen momento para que te plantees abandonar este hábito.
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Reduce o evita el consumo de alcohol
Aunque el consumo de alcohol ocasional o moderado (menor de 50 y 140 g/semana) no está discutido con unos hábitos de vida saludables, durante la donación no debes beber nada de alcohol, ya que esto podría afectar negativamente a la calidad de tus óvulos.
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Controla tu peso
Peso corporal e infertilidad están muy relacionados. Un Índice de Masa Corporal alto o bajo puede afectar negativamente a la calidad de los óvulos y comprometer el tratamiento de la donación.
Por este motivo, todas las donantes de óvulos deben mantener un IMC entre 18 y 25. Eso nos ayudará a garantizar tu seguridad, tanto en la fase de suministro de medicación como en el momento de la punción (sedación). Además, también es un factor determinante para mantener una buena calidad ovular.
Si estás por encima o por debajo de este índice, desde Equipo Juana Crespo te ayudaremos a mejorarlo dándote unas pautas para mejorar tu alimentación.
Como ya sabes, el sobrepeso se asocia con otras patologías y puede afectar negativamente a tu calidad de vida. Controlar tu IMC es un hábito positivo que puedes adoptar antes de donar y que conviene mantener después. Si tienes problemas, te aconsejamos acudir a tu médico.
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Haz ejercicio
El ejercicio, realizado de forma habitual, contribuye a establecer un bienestar físico y mental. Además, mantenerse activo puede ayudarnos a mejorar nuestra capacidad reproductiva.
Antes de donar es aconsejable llevar una vida activa y hacer deportes que, aunque no sean demasiado exigentes, contribuyan a mejorar tu bienestar. Hablamos de caminar 30-40 minutos al día, practicar yoga o pasear en bicicleta.
Una vez adoptados estos hábitos y veas sus efectos positivos en tu cuerpo y en tu mente, ¡no podrás abandonarlos!
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Descansa suficiente
Aunque a veces infravaloramos su importancia, el descanso es un factor importante para la salud y el bienestar, en cualquier etapa de nuestra vida. Pero, ¿qué tiene que ver con la fertilidad?
Durante las diferentes fases de descanso, los tejidos del cuerpo crecen y se reparan, la energía del cuerpo se restaura y segregamos hormonas, entre ellas, algunas relacionadas con la ovulación como la leptina, la progesterona y los estrógenos.
Por eso, durante todo el proceso de donación es importante que respetes tus horas de sueño, algo que, en realidad, deberías controlar durante todas las fases de tu vida.
