Celía tenía sueños, irse a vivir al norte y ayudar a los demás. Cuando conoció la posibilidad de ayudar a otras mujeres donando sus óvulos no lo dudó y vino a informarse a Equipo Juana Crespo. Comenzó el proceso de donación al que ella llama: el círculo de sueños 

Celia es una chica de 20 años que vive en Valencia, bueno vivía hasta hace nada. Siempre ha sido una niña despierta, traviesa y con las cosas claras. De pequeña le encantaba disfrazarse. Un día en casa con su madre le pidió permiso para disfrazarse, cogió lo que había por casa, un pintalabios rojo de su madre con el que se untó toda la cara y se disfrazó de Spider-man. Quizás Celia ya estaba intentando decirnos lo que para ella era realmente importante: ayudar a los demás.

Celia es soñadora, sueña con un mundo justo e igualitario. Tiene proyectos, el más importante es vivir en el norte de España trabajando en temas de integración social y viajar, viajar mucho, todo lo que pueda.

Cuando Celia oyó hablar de la donación de óvulos, su parte más curiosa y altruista le llevó a preguntarse: ¿qué es eso de la donación de óvulos? y fue consciente de que existen mujeres que por diferentes causas nunca podrán ser madres con sus propios óvulos y que para ser madres necesitan irremediablemente de la solidaridad de otras mujeres. Fue entonces cuando se puso en contacto con nosotros y le informamos de todo el proceso de la donación de óvulos y de cuáles son los requisitos, las ventajas y los inconvenientes de donar óvulos. En ese momento, Celia decidió que donaría sus óvulos a otras mujeres pero que lo haría con la máximas garantías de seguridad para su salud.

Nada más hablar con ella nos dimos cuenta que teníamos delante a ese tipo de personas que saben apreciar lo que las vida les pone delante y que son capaces de aportar creatividad y sueños al mundo, y se apuntó al programa de donación de óvulos en lo que ella calificó como el círculo de sueños. Ella ayuda a otras mujeres con sus óvulos para que puedan ser madres y, gracias a la compensación económica derivada de la donación, este acto altruista le ayuda a cumplir su sueño de irse a vivir al norte.

En la actualidad, Celia vive en Bilbao, está muy feliz y ya ha donado dos veces en Equipo Juana Crespo.